Misión a Marte

"Misión a Marte" es el primer episodio de la segunda temporada de Backyardigans y el vigésimo primero de la serie en general. En este episodio la Comandante de la nave espacial Uniqua, el Oficial científico Pablo y el Teniente Austin van en busca del origen de una señal misteriosa en el planeta Marte con ayuda de los miembros de control de misión Tyrone y Tasha.. Una comunicación recurrente en la que puede escucharse "Boinga, Boinga". Fue escrito por Robert Scull.

Sinopsis[]

"Es una aventura fuera de este mundo ambientada con la música de Kenyan Highlife, mientras los intrépidos astronautas Uniqua, Pablo y Austin vuelan a Marte para encontrar la fuente de una señal extraña que se transmite de vuelta al control de misión".

Trama[]

Los astronautas se preparan para abordar la nave espacial que los llevará a Marte en una mesa de picnic en el patio, mientras Tyrone y Tasha les comunican cual es su misión. Posteriormente se trasladan a la plataforma de lanzamiento donde con un cielo despejado están más que preparados para despegar, control de misión está todo el tiempo muy al tanto de ellos y pronto aterrizan sobre la superficie del planeta rojo. Para investigar el origen de la señal que decía Boinga Boinga, tienen la ayuda de ROVER, un robot de exploración marciana que además es muy juguetón.

Mientras los tres astronautas van con cuidado por la superficie del planeta en busca de alguna pista que les indique el origen de la señal inicia una lluvia de meteoritos que les golpea fuertemente en sus cascos por lo que buscan refugio en una cueva cercana. En la cueva por exceso de peso sobre un risco terminan cayendo hacia una especie de lago en el que además de perder a ROVER, pierden todas sus esperanzas pues ya no se pueden comunicar con control de misión quienes se preocupan mucho. Con el animo de Uniqua, Pablo y Austin recuperan la esperanza, encuentran a ROVER y tratan de salir del lago en el que se metieron.

Tras un rato buscando la salida dan con lo que parece ser una ciudad y llenos de curiosidad tocan el timbre en una de las casas para ver quien hay adentro. Los astronautas son recibidos por una pequeña criatura que no deja de decir "Boinga" y pronto se encuentran también con su madre quien les explica un poco del lenguaje marciano. Momentos después consiguen dar con el origen de la señal misteriosa, Boinga jugando con el teléfono celular de su madre. Por lo que los astronautas pueden regresar sin problemas para un bien merecido almuerzo.